Mi madre me llevaba hasta la puerta, y yo ni siquiera entraba. Me iba al parque, a hablar con Javi, que seguía rondando por el instituto, o a la biblioteca.
px 79
También alcanzó el privilegio de leer. En la biblioteca del hospital encontró varios libros escritos por su padre, entre ellos El ratón de Sonia, pero los conocía demasiado bien y además, eran para niños. Hojeó un volumen de Kafka, que contenía muchos de sus cuentos. Le gustaron los títulos. Uno era era El artista del hambre; otro, El deseo de ser piel roja.
px 124
Se levantó, comprobó que sus padres dormían y que su hermano tenía cerrada la puerta de su cuarto -sin duda seguí inmerso en su mundo virtual de altos elfos, dioses menores y otras mitologías- y bajó a la biblioteca, que estaba en el sótano.
px 132
-¿Tiene todo esto alguna relación con los libros que escogiste de la biblioteca? -le preguntó a Sonia.
-Y con la foto. La foto de Portobello.
px 135
Sonia se dio por aludida. Consultó la página web de la Biblioteca de Cataluña y buscó en la hemeroteca, sin encontrar nada de interés.
VICENTE MUÑOZ PUELLES; La foto de Portobello. Edelvives, 2004
IV PREMIO ALANDAR DE LITERATURA JUVENIL
Aportado por JMV

No hay comentarios:
Publicar un comentario