lunes, 27 de febrero de 2023

Un día volveré

 

px 30

Ese cuarto, que ocupaba Balbina desde las navidades del cuarenta y dos, cuando estaba embarazada y llegó pidiéndole cobijo a su suegra, había sido una especie de biblioteca del difunto Sisco Julivert, que fue un hombre instruido, viajante de comercio.

px 178
Era un salón-biblioteca que se abría en abanico y comunicaba con la terraza posterior, frente al parque, mediante puertas correderas de cristal.

px 189
Terminó su primera ronda, fumó un par de cigarrillos sentado en un banco de losetas frente al porche, se encaminó luego hacia la terraza trasera y entró en el salón-biblioteca quitándose la americana.

px 198
Oyó una puerta cerrándose de golpe y luego apagó las luces.
Las de la biblioteca seguían encendidas. Se sirvió una ginebra con poca agua y salió a la terraza.

px 312
Después de cenar, los Klein y su invitado prolongaron la velada en el salón-biblioteca. Jan cenó en la cocina con Mercedes y Elvira.

px 313
-No consigo dormir. Y si duermo, tengo pesadillas espantosas. -Hizo una pausa y agregó-: ¿Qué estará tramando lady Constanza?¿Sigue en la biblioteca, conspirando con ese elegante mequetrefe?


JUAN MARSÉ; Un día volveré. Plaza&Janés, 3ª edición, 1998

Aportado por JMV

No hay comentarios:

Publicar un comentario