Quiere darme conversación, quiere darme conversación. Por un momento tengo la tentación de contarle que leo, sí, y que escribo sobre los libros que leo; que apunto palabras y párrafos enteros, los párrafos que me intrigan, que despiertan mi emoción. Que los libros los saco del bibliobús una vez al mes. Que la bibliotecaria me ha dicho que soy la mayor lectora de la provincia. Me imagino a la bibliotecaria, con su cara de pan y sus gafotas y su acento cerrado, diciéndole, eh, tú,
forasteiru, no la mires con condescendencia que seguro que leyó más que tú. Me da la risa y a la vez siento un ramalazo de malhumor. Pax. 51
Acudía a la escuela en el páramo y pasaba los veranos en la montaña. En la montaña estaba la vida salvaje; en el páramo, domesticada. Pero también sucedían más cosas, había una pequeña ciudad, había más niños, había más adolescentes, había bares, fiestas , Carnaval, la Patrona, y una biblioteca grande y antigua, donde refugiarse las tardes de frio, y un teatro, grande y antiguo, donde ponían las películas del año anterior. Había vida humana; ese otro tipo de vida. Pax. 264
Riego Anta, M. del. (2025). Cordillera. AdN.
Aportado por Anxo